3.2. Las páginas de texto en el libro.

En esta lectura se tiene en cuenta la teoría del diseño planteada por Douglas M, (1994) para la creación, diseño y edición de libros. A continuación presentare los factores más elementales que hay que tener en cuenta en el momento de editar una pieza bibliográfica.

Las márgenes son un importante elemento que delimitan el espacio empleado para las palabras que vamos a poner sobre una página y su espaciado entre el texto y la línea de margen; por lo que es aconsejable en la práctica, tener las matrices de los diferentes trabajos que se realicen, ya que estas nos facilitaran el proceso de todas las páginas que se necesiten imprimir para un libro, empleando procedimientos mucho mas mecánicos y eficaces. 

Aspectos de una página de texto

El Formato.

Elección de su forma, tamaño y material, tanto para las páginas como para su sobrecubierta y cubierta, es importante la innovación también en los empleos y usos que aprovechemos de este, partiendo de conocer muy bien su naturaleza, el tratamiento que se le debe dar y su procesamiento.

Podemos tener en cuenta que el tamaño del formato no afecta las necesidades que se tengan para la utilización de alguno en especial, pero que debe ser proporcionadamente equilibrado al grosor del libro y al contenido final.

Debe ser un formato ligero y cómodo, puede emplearse en dirección apaisada, vertical o plegada.

Dirección del texto.

Depende mucho de la dirección en que empleemos el formato, ya que es la forma en como ira dirigida la lectura del texto, que puede ser de izquierda a derecha, de arriba hacia abajo, en línea continua o en saltos de una página a otra, también pueden formar estructuras de textos como en los mapas conceptuales y diagramas.

El tamaño de las tipografías empleadas en los textos

Que debemos tener en cuenta para su empleo:

• El diseño y la longitud de las líneas de margen
• Tamaño, forma y estilo del carácter
• Interlineado y espaciado entre las letras y las palabras del texto
• Establecer que tan apretado o espaciado se quiere el texto
• El espacio que se debe manejar entre letras debe abarcar tanto como ocupa el tamaño de la “m”, pero no menos como el tamaño de una “n”
• El espaciado utilizado en el texto debe ser proporcional al diseño y al espesor del tipo o carácter
• En la actualidad existen excelentes herramientas digitales, que ofrecen muy buenos sistemas preestablecidos de márgenes para diferentes tipos de textos
• Haciendo buen uso de estas recomendaciones encontraremos un equilibrio que reflejara un buen aprovechamiento de las tipografías
• No se puede obtener un buen espaciado justificado cuando la longitud de la línea de espaciado no es la apropiada para el cuerpo del carácter
• Se recomienda establecer desde un principio el valor fijo de la longitud de espaciado entre las letras, el cual normalmente equivale al ocupado por el cuerpo de la “i” minúscula, siendo el más cerrado normalmente
• Un espacio en blanco es tanto como la línea conceptual que nos guiara hasta el final de la lectura del texto, es a su vez el espacio que rodea a este, que se encuentra entre las letras y las palabras, y separa las líneas, las columnas, las páginas, las cabeceras, el texto y los comentarios, es asimilable con el área por donde se conectara y circulara la lectura. Por lo que es importante saber que un mal empleo del espaciado, como su exceso o disminución, puede causar la fatiga y pérdida de la concentración en el lector.

Sobre el empleo y uso del carácter en el texto escrito.

Cuando empleamos algún carácter especial, debemos tener en cuenta que este pertenezca a una familia que este conformada completamente con sus correspondientes negritas, cursivas y condensadas para cada letra y número; de la misma forma se recomienda emplear caracteres que por su diseño y composición sean económicos y rápidos en sus formas de aplicar, digitalizar, reducir, ampliar, reproducir, imprimir y leer, tanto en un libro, como en una pantalla de cualquier ordenador o recurso multimedia.

Por lo que hay que tener en cuenta que, existe un catalogo muy amplio que ofrece diversos tipos de fuentes ya digitalizadas y de fácil acceso; en realidad muy pocas funcionan y aplican estas características que debe tener un carácter para un texto escrito entre tantas que hay en el mercado del diseño de fuentes, que han sido el resultado de un largo proceso evolutivo del diseño de la tipografía en el mundo a través de los siglos, y gracias al avance en las técnicas para producir tipos, ya que anteriormente el trabajo de un grabador de caracteres era muy dispendioso y arduo para obtener la mejor calidad de terminación en los minúsculos tipos que eran grabados, los cuales estimaban un tiempo de punteado aproximadamente de un día por cada uno, dependiendo del ojo y la versatilidad de la mano del artista, que imprimía cada sutil detalle y modificaba las características que pueden definir una tipografía especifica.

En la actualidad, este trabajo es mucho más sencillo con la ayuda de los computadores y los diferentes paquetes de software que se venden en el mercado o que se pueden adquirir gratuitamente y de forma rápida a través del Internet, los cuales nos ofrecen amplias posibilidades de conocer, crear y utilizar multitud de fuentes, generadas a partir de estándares de diseño y sus las variantes tipográficas que definen mucho mejor un tipo; lo que causa un aceleramiento en el desarrollo y avance tecnológico de los ordenadores, las pantallas y equipos de impresión caseros e industriales, como los empleados en las empresas editoriales y de artes gráficas.

Como emplear bien un carácter en determinados textos escritos

Con la evolución en el diseño de tipos, se han modificado las maneras de emplear los caracteres dentro del cualquier texto escrito, por lo que se ha abolido la idea de que los  cuerpos permanezcan fijos y del incremento del espaciado entre letras; por este motivo se puede emplear un espaciado intermedio, que como lo habíamos mencionado en el escrito sobre “Las páginas de texto en el libro”, no debe ser mayor al espacio ocupado por la letra “m”, y no menor que el ocupado por la “i”, correspondiéndole al espacio ocupado por la letra “n” un espaciado intermedio.

Anteriormente se pensaba que un cuerpo de 10 puntos para una fuente era muy pequeño, y uno de 11 demasiado grande; hoy en día esto es relativamente modificable de acuerdo al uso, el contenido y al tipo de publico al que va dirigido el escrito, ya que en algunos textos funcionan unos cuerpos dependiendo del equilibrio que le aporten al texto, extensión de las líneas, del espaciado y de los párrafos; la ubicación y función que tienen en el texto, como títulos, portadas, índices, subíndices, bibliografías, etc., que le dan una dirección y orden estructural para comprender mejor la lectura.

Tabla 28.

Estándares para el uso de caracteres.

Tabla 29.

Recomendaciones de aplicación.

El Título como el principio de un nuevo Capítulo

El Título estará siempre ubicado donde se necesite proporcionar un espacio para darle aire al texto o a la página, es un silencio que le brindara un descanso al lector mientras realiza el camino de lectura por el texto.

Del  mismo modo este estará subordinado a la portada, la cual es la parte a la que se dirige más el lector, ya que estos por sí solos no son tan buscados ni recordados en el libro. El diseñador debe subordinar estos a la portada, la cual definirá finalmente el estilo y cuerpos apropiados para el resto de títulos que se pondrán en los capítulos y el contenido que conforme el libro o texto escrito.