lunes, 27 de diciembre de 2010

2.4. EL LIBRO-ÁLBUM EN COLOMBIA


Obras y autores colombianos
En la actualidad existen numerosos artistas colombianos dedicados a la ilustración, más sin embargo hay muy pocos que se destaquen por ilustrar libros-álbum para el público infantil, una de las principales dificultades que encontramos es el poco apoyo editorial y económico que se brinda por parte de las instituciones, empresas y entidades culturales de Colombia dedicadas a divulgar la cultura de una manera educativa y didáctica. A pesar de esto, hay personajes como Ivar Da Coll, quien ve en la producción de libros-álbum una manera de expresarse personalmente, además de difundir nuestra cultura y biodiversidad de una forma artística y muy creativa.

Acercamiento al Arte.
Ilustración 44
Página del libro Chigüiro y el lápiz, de Ivar Da Coll.
Su interés por las expresiones artísticas surge desde su época escolar, cuando a través de la maestra Julia Rodríguez conoce el fantástico mundo de los títeres al vincularse al grupo “Cocoliche” perteneciente al colegio, recuerda que su primera obra fue “Los títeres de la cachiporra”, de Federico García Lorca; Da Coll interpretaba el papel de Don Cristobita el de la Porra. Recuerda muy bien que le gustaba diseñar los muñecos, sus ropas, las escenografías y hacer la presentación en las obras de sus personajes, actualmente conserva aún estos gustos, pero no los practica ya que esta dedicado al dibujo de ilustraciones y la escritura.


Su transformación como artista
En sus inicios Ivar quería convertirse en pintor, y en su casa se dedicaba de lleno a este oficio, pero un día durante su trayectoria profesional conoció a Julia también como escritora de cuentos, quien lo invito a que los ilustrara; Da Coll reconoce que sus primeros trabajos no fueron satisfactorios para el, pero que así mismo durante este proceso también se encariña de algunos resultados, lo que generaría motivación para convertirse en ilustrador a pesar de la presión del tiempo para desarrollar esta profesión.

Ilustrador de palabras
Durante todo este proceso transformativo que ha recorrido Da Coll, vemos como a través de la puesta en escena de los títeres descubre su espíritu como ilustrador que se vincula fuertemente ahora con el de escritor. Ivar se apoya en la imagen para llegar al texto, o prueba también desde las narraciones escritas que crea para obtener imágenes, procesos que alterna o realiza paralelamente, reflejándose en esto una autocrítica y autorreflexión sobre su propio trabajo.

Piensa que en el proceso de escritor, tan sólo esta comenzando, por eso le interesa escribir para niños, ya que al igual que ellos se encuentra aprendiendo un lenguaje que necesita y tiene que ser preciso, claro, divertido y que genere cierta emoción en el lector que observa expectante mientras lee.

Sobre su profesión como ilustrador en el país
Actualmente Ivar labora para una revista de circulación en población infantil, permitiéndole alternar su vocación de artista con la de ilustrador, oportunidad que dice, es escasa en nuestro país para alguien quien ilustra por pasión al arte, ya que se tiene que recurrir a otros tipos de trabajos para subsistir económicamente, ya que las editoriales no ofrecen mucho apoyo.

Piensa que también otro de los problemas de la literatura infantil es su distribución, ya que se estiman en ellos grandes esfuerzos económicos con el riesgo de obtener muy poco en el mercado de las ventas que buscan las industrias editoriales.

La literatura infantil en Colombia
Para Ivar, la literatura infantil ha caído en manos de personas que no han tenido un proceso de preparación profesional apto para tal oficio, siendo algo controlado y manejado por cualquier persona que no tiene una responsabilidad pedagógica y artística con el público infantil aun. Además señala que aun le falta a Colombia una crítica literaria tan amplia en este campo, que involucre las acertadas opiniones de maestros escolares a quienes no se toma en cuenta a la hora de crear un libro infantil. Sus opiniones acertadas tan solo que dan en los salones de clases.

Su trayectoria profesional
Ilustración 45
Portada del libro Chigüiro y el lápiz, de Ivar Da Coll.
Comenzó trabajando para la editorial Norma, cuando Silvia Castrillón, editora de los libros infantiles le permitió participar de uno de los proyectos de la editorial, ilustrando una obra sin texto, que tuviera un personaje basado en la fauna colombiana, entonces las opciones eran entre un tucán o un chigüiro, así nació su primer titulo de una serie de seis, titulado “Chigüiro y el lápiz”. De esta forma es motivado profesionalmente a seguir adelante con la ilustración infantil, y se lanza entonces con “Historias de Eusebio” y “Torta de cumpleaños”, obra que fue escrita inicialmente en verso y luego en prosa. Escribe luego “Hamamelis y el secreto”, finalmente se gestan “Tengo miedo” y “Garabato”.


Sus influencias
Cuando se dedicaba a pintar admiraba a Chagall, encontraba gusto por sus colores y figuras voladoras muy poéticas. Ya como ilustrador comenzó a investigar a Sendack y a Arnold Label, además le gusta la literatura policíaca y la novela negra como las de Chandler, Hammet y Simenon; admite que le gustan las películas de terror para jóvenes y entre sus libros preferidos están Boy de Roald Dahl, Doce cuentos misóginos, de Patricia Highsmith y la insoportable levedad del ser, de Milan Kundera.

Recuerda en estas obras, situaciones conflictivas, momentos que le han marcado limites, su niñez junto a su madre, quien le leía mucho a el y a sus hermanos en las tardes, mientras se acostaban en la cama a escuchar cuentos y a ver las imágenes de los libros.

Teniendo en cuenta un pequeño estado del arte correspondiente a los libros-álbum, se realizaron diferentes análisis alrededor de la estructura y el contenido que conforma la realización de estas obras, específicamente aquellas que han sido elaboradas por autores colombianos y son difundidas libremente en las bibliotecas locales de la ciudad de Bogotá; al igual que aquellas que han sido importadas desde el extranjero y traducidas al español. Se tuvieron en cuenta parámetros específicos de análisis como el concepto empleado, lo perceptual, las técnicas y recursos empleados, el contenido visual y literario, lo simbólico, los aspectos negativos y positivos, igualmente su innovación y/o diferencias con otras obras realizadas.

Tabla 15.
Análisis del libro “Números y palabritas”.

Tabla 16.
Análisis del libro “Pobladores del mar”.


Tabla 17.
Análisis del libro “Memorias de Marilin”.

Tabla 18.
Análisis del libro “Un día, un perro”.

Tabla 19.
Análisis del libro “Este no es mi tractor…”.

Tabla 20.
Análisis del libro “Chigüiro y el lápiz”.

Tabla 21.
Análisis del libro “Mermelada de fresa”.

Tabla 22.
Análisis del libro “Siete ratones ciegos”.

Tabla 23.
Análisis del libro “Mi casa”.

Tabla 24.
Análisis del libro “Renato”.

Tabla 25.
Análisis del libro “Mientras se enfría el pastel”.

Tabla 26.
Análisis del libro “Bloblo”.

Tabla 27.
Análisis del libro “La magia del rey blanco”.
























































2.3. EL LIBRO-ÁLBUM COMO MEDIACIÓN SEMIÓTICA Y DIDÁCTICA EN EL ENTORNO EDUCATIVO Y FORMATIVO DE LOS NIÑOS.




La siguiente es una reflexión a partir del texto de Salazar y Salgar (s.d.) sobre los lenguajes empleados en el aula escolar, y como podemos implementar nuevas metodologías y didácticas que generen mediaciones comunicativas en diferentes poblaciones con necesidades educativas especiales.
Ilustración 40.
Niños leyendo.
Debe haber un mayor acercamiento del libro-álbum como una herramienta pedagógica en las escuelas colombianas, del mismo modo aprovechando su doble lenguaje empleado para comunicar y narrar a través del texto escrito y la imagen.


En este sentido puede llegar a ser una mediación semiótica y didáctica entre maestros, padres y estudiantes, enfocada a unas sensibilidades y de acuerdo a unas necesidades educativas y de aprendizaje que necesitan ser atendidas de manera entretenida, a través de una semántica simbólica que estas obras dedican para generar un mayor desarrollo cognoscitivo en la población infantil.

El libro-álbum debe funcionar como un detonante en el aula escolar y el ambiente familiar, que origine análisis y observaciones del mundo real, de la sociedad y el contexto donde se vive, desde su propio lenguaje visual y escrito; por eso es muy importante, quizás más que tan sólo darle a ver a un niño un libro-álbum, el saberlo comprender, analizarlo e interpretarlo para ellos. Ya que a pesar de que sus temas sean dirigidos para niños, no debemos olvidar que, detrás de su encantamiento existe una mente adulta que lo origino con sus símbolos y lenguajes, maneras de sentir y observar en el mundo muy diversas.

Por esta razón es importante el momento en que interpretamos como maestros, padres o simples interlocutores un libro-álbum, sobre todo al hacerlo en un aula de clase, donde debemos recordar que este es un acto de encuentro con la obra, donde a través de esta muestra la intencionalidad del autor frente al público, lo que debe ser captado por el interlocutor y a su vez transmitido a los oyentes, convirtiendo este momento en un espacio pedagógico para la enseñanza de nuevos saberes y el desarrollo de aprendizajes en el entorno escolar y familiar.

Se sugiere conocer los títulos con anterioridad para interpretar sus símbolos, imágenes y lenguajes empleados, de esta forma, en el momento de presentarlo en una clase o en un espacio de lectura, es posible socializarlo mejor con el joven o niño, captar su atención y acercarlos más a través de un lenguaje apto para su contexto infantil y etapa de entendimiento como ser humano.

El libro-álbum ofrece mediante su lenguaje una mediación que no solo está dirigida a poblaciones con todas sus capacidades y habilidades, sino que además también puede desarrollar y efectuar sus objetivos educativos en comunidades con necesidades especiales de aprendizaje; y es pertinente aclarar que precisamente esa es una de las ventajas que ofrecen estas obras literarias, por la versatilidad de su lenguaje interdisciplinario. 
Ilustración 41.
Portada del Libro negro de los colores.

Cabe resaltar que esta visión simplemente no se llevaría a cabo, sino se tuviera una organización semántica abierta a las nuevas posibilidades de trascender el lenguaje por parte del interlocutor, maestro o padre de familia, a los códigos y símbolos de otros que también son transmitidos por los contenidos de estas obras, y son utilizadas constantemente por otras personas que debido a su condición física o mental, sienten, conocen y transmiten el mundo.



Es importante también vincular el libro-álbum como mediación en el currículo escolar de cualquier aula o institución educativa, ya que no solo se aprovecharían sus contenidos, sino que generaría una cultura de este dentro de la escuela y una rutina en las casas, se invitaría mucho más a la población infantil a visitar las bibliotecas, y hacer uso de sus beneficios y servicios que prestan gratuitamente a toda la comunidad en general, además de  propiciar una mayor cultura pedagógica desde su adición como elemento básico en el currículo para el desarrollo de aprendizajes lecto-escritores en la población infantil de los cursos inferiores.

Esta vinculación del libro-álbum al currículo escolar comprende establecer nuevos diálogos entre la manera y la forma de socializar, interpretar y analizar unos contenidos educativos presentados en la obra, unos sistemas de códigos, símbolos y signos específicos, elementos cognoscitivos para el desarrollo del habla, la escritura y la lectura, por último, la interpretación narrativa del interlocutor o lector del libro-álbum; todo esto vinculado a través de los procesos del acto de presentación del libro-álbum, la organización semiótica que contiene este y la que maneja el interlocutor, y la integración de estos elementos al proceso de un currículo o programa educativo como mediación semiótica y didáctica.
Ilustración 42.

Los libros y la televisión.
Otro aspecto importante a tener en cuenta es el del libro-álbum como un objeto que abre un espacio propiciador para configurar identidades e identificar las tendencias globales de los estudiantes o de nuestros hijos, a través de las simbolizaciones que nos muestran las obras y la socialización en el momento de conocer y presentar el libro en un aula o lectura de este.



Los medios de comunicación son mecanismos de información abierta, que necesitan ser analizados con objeto critico; más cuando estos medios pueden llegar a influir mucho más en la atención de los niños con sus efectivas fórmulas publicitarias, televisivas, digitales, radiales o simplemente trucos comunicativos que envuelven masivamente la atención y los bolsillos de los inocentes usuarios y consumidores, siendo en el público infantil un fenómeno que no deja de ser mucho más grave y mayor.

Este tipo de público al encontrarse más con los libros-álbum, están ejercitando sus facultades para leer y escribir, además de despertarles la imaginación y la curiosidad por el dibujo y el inventar nuevas historias a partir de las imágenes que está observando, tomando al libro-álbum como un excelente ejemplo que podría muy bien reemplazar el tiempo que se dedica en una familia para ver novelas en las tardes o en las noches, por un momento para reencontrarse con los más pequeños de la casa, y por qué no, con uno mismo después de un duro día de trabajo y estrés, ya que muchos de los temas tratados en los diferentes títulos despiertan muy tiernamente los más profundos sentimientos humanos, los olvidados recuerdos y experiencias de nuestra niñez, causándonos nostalgias, tristezas, alegrías y compasiones hasta en el más duro corazón humano de un adulto o niño.

No olvidemos que estas fantásticas obras infantiles no dejan de ser al igual que el Internet o la televisión, un medio que comunica algo, que nos informa a través de una narración algo importante, y que como libros nos quieren enseñar saberes y valores esenciales para la construcción social del pequeño infante, quien se encuentra en una etapa de formar su identidad, desarrollar y adquirir aprendizajes que no logran configurarse de manera apropiada debido a toda la mala información transmitida y adquirida a través de todos los medios de comunicación masivos.

El habla en este sentido puede ser  tomado como una herramienta comunicativa, al igual que el tacto, la escucha, la vista y la percepción del sentir espacial y físico del cuerpo humano, más llamado y conocido como lenguaje corporal o kinestésico; herramientas importantísimas para la relación con el otro, los otros y lo otro, sensibilidades que son despertadas por el lenguaje empleado en los libros-álbum con sus formas, texturas, diseños, textos y colores, que nos pueden ayudar a explorar como maestros, padres o creadores, las transiciones discursivas que pueden originarse desde la oralidad y la escritura a lo audiovisual, lo digital y otros tipos de códigos, nuevas tecnologías y medios masivos de comunicación.



Otro factor de relevancia que relaciona el libro-álbum como un lenguaje semiótico en el aula es su innovación, dado que es dirigido a un público infantil, pero de gustos diversos y especiales. Como creadores se debe emplear nuevos formatos, diseños, textos, texturas, colores, tipografías, caracteres, tapas, entre otros recursos estéticos propios del lenguaje plástico y visual; y es que para los diseñadores e ilustradores es importante innovar en el tema de los libros-álbum, sobre todo en medio de un mercado tan competitivo con países que tienen un excelente desarrollo y apoyo editorial dedicado a este campo de la literatura, específicamente en el caso de Colombia, como lo decía Ivar Da Coll en una entrevista con Beatriz Robledo, de la revista “Hojas de lectura”; para el ilustrador colombiano es difícil sobrevivir tan solo de ese oficio, por lo que se ve en la obligación de encontrar y buscar otras alternativas económicas, y a pesar de que existen en el país excelentes ilustradores, el apoyo editorial es mínimo para este género literario tan importante por su función pedagógica y educativas en los lectores infantiles.
Ilustración 43
Página del libro “La princesa de Trujillo”, de OQO Editora.
Es por eso que, el lenguaje del libro-álbum debe superar cada vez más las fronteras idiomáticas a través de las imágenes, trascender sus códigos a otras temáticas poco tocadas de la vida, vincular diversos lenguajes que puedan ser transmitidos fácilmente a todo tipo de población con capacidades excepcionales y discapacidades físicas; explorar cada vez más en los campos de los sentidos, el habla y la lecto-escritura, el dibujo, la edición, la composición visual, el diseño gráfico, la tipografía, la fotografía, la encuadernación, el empaste y la presentación física, ofreciéndonos una amplia gama de campos investigativos alrededor de los contenidos que construyen la esencia y la estructura de un libro-álbum como medio de expresión, comunicación y enseñanza para los más pequeños, quienes esperan de nosotros, los adultos; nuevas, bellas y divertidas pero responsables experiencias, acciones y creaciones que les muestren y reflejen en un lenguaje apropiado para sus edades una realidad social que es dura e inevitable para todos, quienes convivimos en un hábitat que es destrozado y debe ser protegido y valorado como el bienestar y futuro digno que debemos preservarles y procurarles a los niños de todo el planeta, eliminando a través de la lectura de los libros tanta ignorancia y miedos, que se nos han sido infundidos en la escuela y la familia a través de las diferentes influencias de los poderes políticos, económicos y religiosos que intervienen estos contextos.










2.2. EL LIBRO-ÁLBUM COMO EXPRESIÓN ARTÍSTICA.


Para entrar a comprender y reflexionar sobre el lenguaje artístico reflejado y empleado por los libros-álbum, es necesario partir de unas bases teóricas con respecto al lenguaje visual y literario que identifican propiamente el estilo de estas obras con carácter educativo e infantil, desde el texto de Dawn (1981), se quiere reflexionar sobre el movimiento Dadá y como sus elementos característicos llegan a tomar parte en la producción de libros-álbum contemporáneos.

La novedad del Libro-Álbum
Ilustración 37
Página del libro Renato, de Manolo Hidalgo.
Hoy en día las empresas editoriales cuentan con excelentes ilustradores y artistas especializados en el campo de la ilustración, la edición y la encuadernación de Libros-Álbum, mostrándonos nuevos cambios e innovaciones sugeridos por sus lenguajes simbólicos.


Del mismo modo, existe una relación intrínseca entre imagen visual, escritura y poesía; reflejando en sus innovadoras ilustraciones, cuadros desde el detallado dibujo con pluma y tinta, hasta el descomplicado cortado y pegado del collage. Todo con ayuda de los rápidos y cada vez más tecnificados ordenadores, los cuales han transformado la acción creadora de expresiones artísticas en creaciones con características mucho más espontáneas, eficaces y veloces para producirse y difundirse; del mismo modo, adquirir mayor libertad de expresar muchos más contenidos en cortos procesos de elaboración, retroalimentando sus lenguajes con los sistemas de programación multimediales que ofrecen las grandes suites de software internacionalmente reconocidas, como los de Microsoft, Adobe, Macromedia, entre otras más.

Asimismo, el libro-álbum se abre camino como un objeto descubridor, que además abre fronteras como mediación semiótica con lenguajes más perceptivos, con lo que genera una mayor interrelación y difusión comunicativa con otros tipos de públicos dentro del contexto formativo y educativo.

Universo de fantasías y emociones

Ilustración 38 
Página del libro El rey blanco, de Xavier Blanch.
Siendo el libro-álbum un objeto concebido desde una visión educativa y artística, no debemos olvidar esta última, cuyo origen parte de una necesidad expresiva y comunicativa por parte de un artista, quien ilustra las imágenes que se complementan con un texto escrito, también creado desde una óptica literaria que despierta desde las letras diferentes sentimientos en el lector o público oyente.


Por ese motivo, es muy frecuente encontrar títulos y obras muy emotivas, que a partir de sus historias para niños, logran capturar su atención y causar cierto goce emocional a través de la imaginación activada por medio de los sentidos, los cuales perciben en sus cautivadoras lecturas una importante fuente de conocimientos básicos para el aprendizaje y el desarrollo cognitivo de los chiquillos.

Pero, además de que el libro-álbum nos despierta sentimientos y emociones, cabe resaltar  su labor pedagógica y formadora de valores humanos, muy importantes para el proceso de cognición y reflexión del público que los forjará y convertirá desde sus propias experiencias y virtudes. Objetivo que se lograra también con la ayuda del maestro, padre de familia o interlocutor que este narrando y presentando el libro-álbum, lo cual deberá ser con una lectura consciente de sus alcances interactivos con otras experiencias y recepciones.

Otro de los aspectos por los que se involucra el libro-álbum como objeto auspiciador de emociones, es su función didáctica en una población infantil trastocada por los efectos negativos de una devastadora globalización mundial; atravesada por conflictos armados, políticos y religiosos extremos, la perdida y daño de los recursos naturales y los hábitos humanos, la violencia y el maltrato infantil, la desprotección, el abandono, la explotación sexual y laboral. Convirtiéndose en factores por los que hemos tenido que avanzar sobre una sociedad que transforma constantemente los sentidos del hombre y sus relaciones con los demás y el entorno; en esta medida, el libro-álbum busca a partir del campo de la literatura dedicada para niños, despertar en el lector infantil una conciencia más humana sobre nuestros actos, a través de un medio que invita al juego desde sus propios lenguajes, divirtiendo y recreando en esta forma una realidad dura de sobrellevar.


Del lenguaje artístico a la acción educativa

Como sabemos ya, el libro-álbum es una obra artística, que además de seducirnos con sus conceptos y estéticas innovadoras desde lo visual y lo plástico, como lenguajes específicos del arte; nos invita a una reflexión pedagógica, sin dejar atrás el fuerte y esmerado trabajo de los ilustradores y editores, quienes bajo un trabajo en colectivo junto a escritores o poetas, buscan una forma de trascender estas artes a campos más elevados del conocimiento, la cultura y el saber humano.


De esta manera proyecta establecer unas expresiones artísticas no solo al servicio de beneficiar a los propios creadores por su trabajo, sino de trascender sus artes al plano de la educación, encontrando en este su función pedagógica y social al ser compartida con un público en etapa de formación humana, con desarrollos cognoscitivos, adaptaciones individuales y sociales con entornos que necesitan ser transformados positivamente desde las acciones y el pensamiento de todos.

No se trata tampoco, que bajo la dirección, producción y creación de un libro-álbum, se obtengan grandes riquezas económicas, aunque tal vez si reconocimientos profesionales y artísticos; a su vez, logra en el campo de la educación alcances más allá de los económicos, llamando mucho más a una conciencia socializadora desde los mensajes que nos dejan estas obras y que necesitan ser mejor comprendidos por todos, especialmente por los niños, quienes serán los que habitaran un mundo de acuerdo a lo que nosotros como adultos les construyamos o destruyamos en un presente que necesita ser reparado constante e inmediatamente.

Estéticas diversificadas
Después de haber realizado algunas observaciones conceptuales y artísticas de algunas obras infantiles, considero que la gama de contenidos, estilos y temas son muy diversos; y aunque existan entre algunas cierta unidad, se marca la diferencia entre uno y otro a pesar de traten un mismo tema. De igual forma sucede entre temáticas, estilos y contenidos; mostrándonos de esta forma que cada vez existe más interdisciplinariedad de medios, conceptos y recursos empleados en la producción de las obras, que podrán así mismo ser catalogadas y dirigidas teniendo en cuenta las diferentes etapas y edades del público infantil, logrando ser eficazmente más difundido y reconocido su conocimiento y saber a todos los niños del mundo que se acerquen a los libros-álbum.

Por estas razones considero que, el libro-álbum debe ser concebido desde una perspectiva individual y personalidad propia, características que mantendrán esencialmente las diferencias entre unas y otras, aun si sus objetivos de enseñar algo especifico son iguales a los de otras obras.

Puede verse que si los clasificamos también por estilos comunicativos, los creadores de los libros-álbum coinciden en técnicas, pero hacen un buen uso de la infinitud de maneras como llevarlas a cabo, alterando o combinando entre si sus elementos básicos para el proceso de producción, generando nuevas y novedosas lecturas que refrescan las técnicas y dan el sello personal de cada uno de sus creadores.

De esta manera, el trabajo realizado por un ilustrador de libros-álbum efectivamente es influenciado por estilos y estéticas anteriores a ellos, manteniendo en esta medida cierta unidad que así mismo se rompe al verse reflejado en las novedades y creaciones que los artistas le imprimen a las obras.



El proceso creativo

Se ha visto que actualmente el trabajo realizado para la producción de  un libro se ha preocupado por llevar a cabo mayores acercamientos entre escritores, ilustradores, editores, encuadernadores, productores de formatos y comercializadores; para que desde cada una de las diferentes disciplinas y campos de acción lleguen a mutuos acuerdos colectivos en donde cada uno aprenderá del conocimiento y saber del otro, lo que proporcionara una mejor capacitación en las técnicas y la producción de las obras, generando una interdisciplinariedad en el proceso colectivo de realización de estas.

Por otro lado, existen también realizadores de libros-álbum muy autodidactas, quienes por sus propios medios desean y quieren aprender las formas, métodos y mecanismos que los capaciten para crear y producir una obra ilustrada. Esto es importante si tenemos en cuenta la eficacia de los medios multimediales, el Internet y la fácil adquisición de los recursos que ahorraran energía, trabajo y dinero, si un artista comprende y aprende mucho mas sobre la producción y comercialización de sus propias obras artísticas.

Como innovar
Retornando a nuestros orígenes infantiles, teniendo en cuenta los aprendizajes automáticos e inconscientes que se tienen, abordando temas que muchas veces desde nuestra perspectiva adulta no logramos percibir, no asumimos o gozamos plenamente desde nuestra posición como mayores de edad, frente a realidades muy observadas y vividas en nuestras sociedades y familias, que para la mente de un niño no dejan de ser experiencias desapercibidas como hechos aislados que también los afectan, pero que del mismo modo desean y deberían comprender mejor. Factores como el maltrato a los demás, todos los tipos de violencia que son generados por el hombre hacia sí mismo y hacía la naturaleza, y los cambios sociales y psicológicos del ser humano.
Ilustración 39
Página del libro Mientras se enfría el pastel, de Claudia Rueda.
Todo acontecimiento puede ser digno de narrar e ilustrar sin obviar el tiempo ni el espacio donde acontezca, ni los personajes, seres u objetos que intervengan en este. A veces el sinsentido puede guiarnos por caminos inexplorados del lenguaje, el conocimiento y el saber; ser consciente como artistas de crear para enseñar y construir nuevo conocimiento, más no para lucrarse económicamente  en grandes proporciones.


Evitar los rodeos del lenguaje, a los niños hay que llegarles con imágenes concretas y sencillas, donde sea fácil y rápido captar y transmitir el mensaje que se quiere dar, partiendo de medios definidos que despierten sentidos y reflexiones infinitas.

Los automatismos y el azar pueden ser elementos con los que también podemos contar, desvelando las constricciones de la razón y el materialismo, las cuales creemos que no deben ser reveladas a públicos tan jóvenes, siendo procesos cognitivos mucho más expresivos que generan más energía y optimismo en los pequeños lectores.

No cohibirnos a la realización de nuestras propias producciones literarias y visuales, mucho menos de dejar de aprender técnicas y métodos que nos capaciten mejor en los campos de la ilustración, la impresión, la edición, la diagramación, la encuadernación, la fabricación del papel y su comercialización; todos podemos sacar provecho de la imaginación y las habilidades artísticas que posee cada uno.

Reconocer en la actitud expresionista individual un escape de la dura realidad cotidiana, encontrando en esta una abstracción e interioridad reflexiva y personal, que no deja de ser algo que ata al hombre con la vida diaria. Podemos asimismo abordar y resolver los problemas que nos aquejan como adultos desde la literatura infantil.

Características de la estética visual del libro-álbum
Expresa primitivismo
Cultiva la gestualidad del artista
Experimenta con nuevos medios a través del collage y el lenguaje poético
Búsqueda de imágenes elementales, abstractas o surrealistas
Permite al azar que entre de vez en cuando en el campo de la composición y expresión artística
Recurre a imágenes transfiguradas
Genera goce, sentimientos y emociones
Son obras con características diferentes entre sí, aunque toquen las mismas temáticas y preocupaciones
Reflejan realidades industriales y tecnológicas  las cuales intervienen en el desarrollo del hombre actual.
Propone desorganizaciones poéticas de la realidad a partir de la imagen.

El estilo literario
Cuando leemos un libro-álbum observamos y percibimos que el lenguaje poético empleado es en verso o en prosa especialmente dirigido a un público infantil, combina figuras literarias y transfigura el lenguaje literario y escrito tradicional, a veces introduciendo palabras inventadas o frases, que alternándose con la imagen y otros conceptos generan lecturas alteradas y transfiguradas de cómo los conocemos y manejamos habitualmente.

Juega con los elementos fonéticos que desarrollan mejor la abstracción de la lecto-escritura en los niños, a través de la simultaneidad y el rudísimo que generan los poemas y relatos.